Depende de varios factores, entre ellos la calidad del lecho receptor, la vascularización y aporte nutricional que éste le pueda brindar así como varios factores que aquí detallaremos:
La zona receptora del injerto debe estar en condiciones óptimas, no debe tener procesos infecciosos activos y su vascularización debe ser adecuada, de tal manera que pueda nutrir el tejido injertado.
El trauma folicular ya sea por trasecciones, estiramiento, dobleces o aplastamiento es suficiente para una reducción en la tasa de crecimiento folicular. El fenómeno de deterioro se observa con microscopio electrónico. Un leve toque en el bulbo pude causar una disminución en el crecimiento de 35 a 64%.
Hoy existe varios tipos de medios de conservación folicular, entre ellos tenemos:
Solamente 3 minutos son suficientes para que los folículos empiecen a deteriorarse, disminuyendo así el crecimiento folicular. Existe mayor deterioro en las unidades foliculares de 1 pelo, que en las de 2, 3 y 4 pelos.
Una alta densidad en procedimientos con más de 50 folículos/cm2 tiene una baja supervivencia en relación a otros con menor densidad. Este fenómeno ocurre por el efecto de isquemia-reperfusión.
El frío actúa como un factor protector frente al daño físico. Una temperatura de 4ºC es la ideal para mantener los folículos viables con una mejor tasa de supervivencia.
El 1992, el Dr. Bob Limmer realizó un estudio con 200 unidades foliculares con distintos períodos de tiempo fuera del cuerpo y fue constatado lo siguiente:
| HORAS | % SUPERVIVENCIA |
| 2 | 95% |
| 4 | 90% |
| 6 | 88% |
| 8 | 83% |
| 24 | 79% |
| 48 | 54% |